Denuncia del Consejo Comunal Llovizna de Urimare del Estado Vargas.
MAMÁ… QUIERO SER INGENIERA DE INAVI
Esta vez, seremos obedientes y honraremos la sugerencia de Santos García Zapata de Notivargas y no calificaremos. Cero adjetivos. Acogeremos la política editorial del diario Ciudad Caracas y no nombraremos a nadie.
Cero nombres. Pa’ ve’ si nos publican. De Aporrea y su censura absoluta no nos cuidaremos, igual nos rebotan los envíos y de los demás tampoco, porque pese a que dejó de circular ¡AHÍ VIENE PEDRO! y nos estamos “portando bien”, “guardando un silencio conveniente y responsable”, igual siguen diciendo que somos de la contrarrevolución, así que al grano.
La gráficas muestran lo que inicialmente iba a ser un Simoncito, no el de Playa Verde que se perdió, sino el del Conjunto Residencial Playa Grande, en la calle 7 de Playa Grande, parroquia Urimare del estado Vargas.
Planificado para diecisiete (17) ambientes, además de consultorio de Barrio Adentro y espacios administrativo, resultó en esto que ven en las gráficas.
Su construcción obedeció o debía obedecer a un acuerdo entre Inavi y la comunidad porque, era parte de lo que contemplaba el proyecto inicial del Conjunto Residencial, construir en ese espacio un Simoncito.
Arrancó la construcción del Simoncito en febrero de 2012, contrataron a unos cuantos vecinos para abrir los hoyos para las fundaciones y ¡Voila! de los recursos para diecisiete (17) ambientes alcanzaron sólo para dos (2) y de los dos (2) que finalmente construyeron, se dedicaron, durante el mes de octubre de 2012, a demolerle las paredes y ventanas.
Ahora, donde había paredes hay ventanas, donde había puertas, paredes, donde había ventanas, bloques de ventilación, donde había techo raso, nada, donde había lámparas tampoco y lo que creímos e iba a ser un Simoncito, ya no sabemos ni que es, porque a fin de cuentas no existimos, nadie nos consulta.
Hemos sido breves, pero sospechamos que con esta construcción está pasando algo y únicamente nos importa a nosotras y nosotros, porque nadie viene a corroborar lo que decimos y si vienen no nos dicen nada, pero escuchamos, eso sí, las murmuraciones y sentimos la rabia porque vemos y decimos.
Mientras el juego de la construcción de lo que iba a ser y ya no es Simoncito, sigue y nadie bota tierrita.
Urimare, martes 6 de noviembre de 2012
Unidad de Contraloría Social Consejo Comunal La Llovizna de Urimare.
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